El pasado miércoles de artículo te contábamos acerca del significado, importancia y datos relevantes sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenible en los que nos hemos comprometido para formar parte y contribuir en la mejora de la sociedad y su impacto positivo en todos nosotros y en las generaciones venideras.
Hablamos sobre el objetivo 4 y la educación de calidad y el objetivo 5 y la igualdad de género.
Hoy te contamos más sobre el objetivo 8, 10 y 15 en los que estamos comprometidos a trabajar dentro de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas.
3 – Objetivo de Desarrollo Sostenible número 8: Trabajo decente y crecimiento económico
La base de este objetivo es promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos.
Su importancia está en la erradicación de la pobreza, ya que es posible eliminarla a través de empleos estables y bien remunerados. No solo basta, no obstante, conseguir empleo, ya que además de crearlos también habría que mejorar las condiciones de unos 780 millones de mujeres y hombres que trabajan, pero que no ganan lo suficiente para salir de la pobreza.
Cuantas más personas sean productivas y contribuyan al crecimiento de un país, más se beneficiará la sociedad, ya que el empleo y el trabajo permiten una globalización justa, reduce la pobreza y lleva al camino de la no perturbación de la paz.
Algunos datos es que casi 2.200 millones de personas viven por debajo del umbral de pobreza de 2 dólares de los Estados Unidos. La cifra de desempleados, según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), ascendió en 2015 a más de 204 millones. El desempleo mundial aumentó de 170 millones de personas en 2007 a casi 202 millones de personas en 2012. De estas últimas, unos 75 millones son mujeres y hombres jóvenes.
Algunas de las metas planteadas con este objetivo son las de promover políticas orientadas al desarrollo de la creación de puestos decentes, el emprendimiento, la creatividad y la innovación; fomentar la microempresa y las pequeñas y medianas empresas; lograr el empleo pleno, productivo y decente, así como elaborar y poner en práctica políticas encaminadas a promover un turismo sostenible que cree puestos de trabajo y promueva la cultura y los productos locales.
4 – Objetivo de Desarrollo Sostenible número 10: Reducción de las desigualdades
La base de este objetivo es reducir las desigualdades en los países y entre ellos.
Su importancia radica en que siguen persistiendo las desigualdades en todo el mundo, tanto dentro de los países como entre ellos. Desigualdades en ingresos, género, edad, discapacidad, orientación sexual, raza, clase, origen étnico, religión y de oportunidad.
El que haya desigualdad afecta al desarrollo social y económico a largo plazo, así como a la reducción de pobreza y destrucción del sentimiento de plenitud y valía de las personas.
Lo más importante de este objetivo está en cómo podemos lograr un desarrollo sostenible y hacer del planeta un mundo mejor si hay personas a las que se priva de oportunidades, de servicios y de la posibilidad de una vida mejor.
Datos que ponen de manifiesto esto son aquellas mujeres que viven en zonas rurales y tienen el triple de probabilidades de morir en el parto que las mujeres en centros urbanos. Unos 69 millones de niños menores de 5 años morirán por causas que son prevenibles en su gran mayoría.
En países más ricos sigue habiendo miseria y democracias enfrentándose al racismo, la homofobia, la transfobia y la intolerancia religiosa.
La desigualdad nos afecta a todos.
Algunas de las metas planteadas con este objetivo son las de potenciar y promover la inclusión social, económica y política de todas las personas, así como la de promover legislaciones, políticas y medidas que se adecuen a garantizar la igualdad de oportunidades y reducción de la desigualdad de resultados.
5 – Objetivo de Desarrollo Sostenible número 15: Vida de ecosistemas terrestres
La base de este objetivo es gestionar sosteniblemente los bosques, luchar contra la desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras y detener la pérdida de biodiversidad.
Su importancia se centra en que los bosques cubren casi el 31% de la superficie de nuestro planeta; desde el aire que respiramos, el agua que bebemos y los alimentos que comemos. Además, tanto los bosques como la naturaleza son importantes para la recreación y el bienestar mental.
Algunos de los datos aportados es que alrededor de 1.600 millones de personas dependen de los bosques para subsistir, los bosques albergan más del 80% de todas las especies terrestres de animales, plantas e insectos y que de las 8.300 razas conocidas de animales, el 8% se ha extinguido y el 22% está en peligro de extinción.
Mantener la diversidad biológica y los servicios de ecosistemas pueden también ayudar a adaptarnos al cambio climático y a la reducción del riesgo de desastres, aumentando la resiliencia de las personas a los efectos del cambio.
Algunas de las metas planteadas con este objetivo para conseguir son las de velar por la conservación, el restablecimiento y el uso sostenible de ecosistemas terrestres, recuperar los bosques degradados e incrementar la forestación y la reforestación, así como luchar contra la desertificación, rehabilitar las tierras y los suelos degradados.
Puedes leer más sobre los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible dentro de la Agenda 2030 de Naciones Unidas haciendo clic aquí.